El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó este miércoles una orden ejecutiva que tiene como objetivo reformar la policía federal. Se produce en el segundo aniversario de la muerte de George Floyd.

La medida ordena a todas las agencias federales que revisen sus políticas de uso de la fuerza, crea un registro nacional de oficiales despedidos por mala conducta y utilizará subvenciones para alentar a la policía estatal y local a restringir el uso de estrangulamientos y restricciones de cuello.

“Es una medida de lo que podemos hacer juntos para sanar el alma misma de esta nación, para abordar el profundo trauma del miedo, el agotamiento que los estadounidenses negros en particular han experimentado durante generaciones”, dijo Biden.

El mandatario estadounidense explicó, además, que no había firmado esta medida antes porque esperaba que el Congreso aprobara una ley de reforma policial que lleva el nombre de Floyd. El proyecto de ley colapsó en el Senado de los Estados Unidos en septiembre pasado bajo la oposición republicana.

Floyd fue asesinado cuando Derek Chauvin, un oficial de policía blanco de Minneapolis, se arrodilló sobre su cuello el 25 de mayo de 2020, mientras otros tres oficiales observaban. El incidente desencadenó una ola de protestas por la injusticia racial.

Chauvin fue sentenciado a 22 años y medio de prisión el año pasado luego de su condena por cargos de asesinato. (Reuters)